lunes, 19 de diciembre de 2016

LLueve

 

 

Llueve
tan sólo llueve
tan sólo es agua

es vida
es llanto

antes cúmulo 
letras
ahora lágrimas 
verso 
libre

luego cristales blancos.

Llueve
tan sólo son lagrimas
escarcha de mis retinas
humedades que me alcanzan
vaho en mi vida
limites que me ahogan.

Llueve
tan sólo en mi parca
soledad de tejidos
piel de mis palabras
techo suturado de melancolías

miedo al acercarse
el final de la terra vitae

es tan simple
lo veo tan ágil llegar

que ya nada queda
tan solo la esperanza
de reencontrarte
aun después de la muerte

entre los abrazos
de la vida, tras la muerte
que nunca debimos dejar
nos alcanzará.



 

 

Foto: UNDER ONE UMBRELLA — Oil Painting On Canvas By Leonid Afremov

sábado, 3 de septiembre de 2016

Tras la puerta de las piedras





Tras la puerta de las piedras
la inercia de los huesos que caminan
las enredaderas de las manos
tejiendo palabras sueltas
mientras el señor del tiempo
no se detiene sino que se apea
y mira de lado a lado
hasta ver pasar el limbo de una nada
que no sabe que existe.

Mi temor no se detiene
es el miedo a no saber andar
hay un camino que no tiene flechas blancas
tan solo destellos de estelas
que surcan el mar de los pensamientos
hasta enrocarse entre mis dedos
y saltar al vacío de un techo que se desvanece.

Que decir de la nada
que no sea un pasillo angosto
donde las barcas se vuelven lineas
y la arena se pega al mar.

Que decir de lo opuesto
sino que no hay mas que un entresijo
un relámpago que se desvanece en el pensamiento
que se siente viejo dentro de un cuerpo
que camina sin ver las estrellas
y que cuando se da cuenta
siente que lo único que de verdad queda
es el amor que nunca llega
pero que siente y añora
porque en su realidad es lo que queda.

Tan solo el amor
es lo que único queda.


lunes, 15 de febrero de 2016

Estimarte




Dibujar la caricia de una sonrisa
desandar las volutas del tiempo
desatar las palabras nunca antes dichas
besar los abrazos antaño dados
dejar las lagrimas colgadas del perchero

salir a la calle...,
respirar de nuevo
deslizándose por la lucerna
de los poros de los sueños

dejar un reguero de tristezas
entre los pliegues del asfalto
destilándose por los sumideros
hasta difuminarse en un anhelo

desclavar tu nombre de los recuerdos
y abrazarte por entero
besar en tus ojos
las lagrimas de otro tiempo incierto

desleír las promesas de un pasado
en tan solo un resquicio
tan solo en un “te quiero”

arrebatarse en un quererte..,
para estimarte
tan solo en un tiempo inerte
cuando la piel de tus sueños

se tiña con  nuestros deseos.