martes, 28 de febrero de 2017

Mente



Desnudate
de la danza de la mente

reconfórtate
con la calma del serte.


La afluencia de la vida
se recoge entre batientes

deshojando ventanas

despojando la noche
de su aroma a oscuras.


Tan pronto se despeja el alba
anidan los sentidos en su tersura

y escudriñan los recuerdos
macerados entre estertores
y destilados resquemores.


La losa que oprime

estanca la silueta de mi estancia

sentada entre una suerte de mullidos
                                                        pensamientos

resquebrajando la vida
                                    escanciadora entre silencios

y apenas bebo un sorbo de mi despertar
                                  ansío que todo vuelva a dejar de estar.



La vida no es mía

ya,
                  ni es para mi
este mundo
                 no es la nada
tan solo
                es el aura

de un tiempo
                                        que se acaba.


viernes, 3 de febrero de 2017

El ángel




El ángel reprende
con sus alas rotas
al viento,
que nacido de la fuente
parece no aquietarse
nunca.

El ángel triste
mira hacia las alturas,
las montañas de blancas lineas
que fueron arrancadas,
tiempo en mano,
por su dilatada caída.

Pero la vida vuelve
una y otra vez
a casa,
y hace florecer
las mañanas de otras ventanas,
con la esperanza
del silente renacer
que su voz
empaña.

martes, 17 de enero de 2017

Aquellos, nuestros últimos besos




Hace mucho tiempo
que dejé que me amaras
hace mucho tiempo
que te amo

las cosas del mundo
se han desgajado
desangrado
por dentro

tan solo
ya soy un sueño
que se eleva
hacia un universo incierto


cuanto mas tiempo vivo
mas tiempo muero

soy hoja al capricho de un viento
que no quiero
envuelto entre lagrimas de luz oscura
ya tan solo te anhelo


qué es cada uno de mis versos
sino las cartas que te debo

qué son son todos mis poemas
sino un grito apagado
un dolor
que aún me besa
en tu recuerdo



Aún cuando pasen cientos de cielos
y los mares se sequen en nuestro desconsuelo
siempre quedaremos, tu y yo,
allí, en nuestra orilla

como granos de arena
como pequeños hoyuelos
tras las huellas borradas
de nuestros recuerdos


Cuanto amor derramado entre versos
cuanto amor derrochado
y perdido
entre aquellos
nuestros únicos
e idílicos besos

Ahora tan solo quedo yo
tan solo quedas tú

y el fin de los tiempos
nos espera
entre nuestros
nunca olvidados besos


Cuanto amor te siento
lo siento tanto
siento tanto
que ese amor
no haya sido
el nuestro

que apenas
muero
y
aun así
te sigo
queriendo.