Abstracto

Buenas noches querida soledad

esta noche he soñado que me despertaba

que los sueños dejaban de vagar entre mis recuerdos

que la razón de mi existencia no vivía

me desperté de los sueños

y comencé a vagar por un sinuoso lugar

no me recordaba y me cruzaba con sombras que no andaban

los cirios eran las estrellas de un cielo que se terminaba

y mis manos transparentes como el humo

se prendían.

Apenas caminaba arrastrando mis ojos

todo era la nada de un mundo desvirtuado

todo eran rostros sin rostro, apagados

sensaciones y cuerpos añorando sus desquiciados años

¿que era todo aquello, sino el respaldo de un camino errado?

Busqué sentido en los sentidos que no tenía

sueños en los sueños que no dormían

enarqué las entrañas de unos pensamientos que no tenían vida

y todo era la nada.

Por fin..., comprendí

era el mundo real en el que habitaba

una pesadilla dentro de un sueño del que nunca despertaba

y de pronto caí hacia bajo sin techo ni suelo al que llegar

todo era así, un mundo dentro de unas letras de vanidad

unos sueños replegados tras las quimeras de unas frases que engañaban

Miré dentro de la llave

entreabrí los ojos que todavía andaban cerrados

y alargué mi alma hasta salirse del cuerpo que me encerraba

y lloré y lloré, entre las tranquilas aguas de aquella extraña mañana.

Prolongué mi vida hasta agostarla en su cenit de plata

porque comprendí que todo era la nada si tu alma no anidaba

nada soy sin tu sed

nada tengo sin tu mano

nada quiero sin tu abrazada realidad

dejaré este mundo virtual para dejar de vivir su esclavitud

dejaré de respirar sus teclas para arrojar de mi vientre sus tentáculos

dejaré para siempre de ser yo para volver a nacer

porque me cansa tanta palabrería vana

tanta frase entupida

tanta generalidad irrealizada.

Despedazaré para siempre mi frialdad

y marchitaré la soledad

cuando tu te me lo propongas

ya sé que estás

y que estás al llegar

cuando llegues me marcharé sin mi

porque ya no amo tu irrealidad.

Nuestro caminar

Te conocí una tarde,

yo paseaba de la mano de una búsqueda que no imaginaba

trenzaba mis pensamientos desabrochando los huecos que ajaba mi soledad

espiaba el viento que pasaba cercano sin inmutarse de mi estado de desaliento

alargaba la mano al cielo pensando que tú todavía estarías allí

esperándome

o quizás naciendo en algún recóndito rincón de este extraño mundo

de pronto te reconocí

estabas sentada en la vera de una luna

una suave playa de letras y espíritus

que oteaban las alas de las blanquecinas olas

sentí que estabas en mi

tan adentro que decidí nunca más alejarme de ti

eras mi reencontrado espejo

ese rasgo que aunque único en mi

en ti me llenaba de gratitud hacia la vida

tan sólo tenia que alargar mi mano 
y pintar tu nombre en mi acera

y allí estarías tú por siempre

caminándonos y sintiéndonos tan cerca

recordándote en mi memoria

nacimos los dos de esta intrincada noria

que es el retorno de la aurora a la vida.

Entre nosotros...

Entre nosotros y el amor

no hay punto final posible

sino bálsamo en piel de flor

que se estremece con pasión.

Entre nosotros y tu amor

tan sólo puede haber fervor

vástago de un efímero credo

que se entroniza en el corazón.

Entre nosotros y mi amor

tan sólo un baile abrazado

sin movimientos transitorios

sino un fundirse con pasión.

Toma mi mano en tu regazo

hurtemos un rincón cercano

atrincherémonos para siempre

en  el beso  de nuestra ilusión.

Bailemos al son de los sentimientos

prendidos en estas rocas ancestrales

que con su mirada perdida en el tiempo

grabará para siempre el único beso

que me rescatará de esta dócil prisión.