domingo, 29 de enero de 2012

Isla solitaria




Me gustan las puestas del sol y su renacer al filo de una mañana solitaria
donde el espejo de las olas me devuelve a ti al atardecer de una vida
donde los dorados reflejos del sol invernal convergen
entre tu silueta y los recuerdos del abrazo nunca herido,
del beso nunca posado sobre las alas sonrosadas de tu sonrisa incierta, a veces,
y recubierta de pétalos rojos en ocasiones,
pero siempre plena de amor y alegría por la vida en comunión,
donde nuestras almas alcanzan su cenit
y se envuelven del manto de una noche tranquila
para descansar juntas
y nunca más alejarse del camino de la indisoluble y verdadera vida,
aquella que algún día nos tenderá su mano
para llevarnos juntos a la isla en cuna de terruño
de la que nunca debimos, quizá, partir.

La muerte no hallará nunca nuestras almas
pues la vida en Luz es la puerta que nos acoge
y la que nunca podrá traspasar sin morir de verdad.

Eres ángel de vida y todavía no lo sabes,
eres destello de luz blanca y todavía andas a oscuras,
a gatas mirando sin ver que todo en la vida es vida
y nada más que vida en el amor de la vida.

Aférrate a tu bote y despliega tu ala blanca
y verás surcar las olas desde la cabaña de tus ensueños,
la que la nos abandonará  en el mar del amar,
la que desprendida de nuestras almas
se teñirá de cristales áureos
y doradas arenas
salpicadas de las huellas de los pies de dos niños
que nunca dejaron de serlo,
que sin saberlo habrán retornado para siempre
al rincón que al principio de los tiempos
les dio el nacer y la savia de los ángeles
que nunca se dejaron del todo sumergidos en el sueño
de una larga y oscura noche,
de la que ahora,
quizás un día,
despertarán
y se lanzarán al abrazo
en el que nunca se obligaron,
ni dejaron de amar.

Pellízcame en los labios
la próxima vez que estemos juntos
en tu sueño,
porque ansió poderte ver
al despertar.

Eres en el amor,
el refugio de mi mar
donde el amor
sólo blande para amar.

4 comentarios:

Un Jazmín en mi Trastero dijo...

Con tu Luz, surcaré los mares sin miedo a perder mi alma en algún rincón de la No vida.

Serás mi refugio en los días de tormenta y mi calma en los días que la espuma roce lenta mi rostro ...

Mi Beso eterno (gracias)

mardelibertad dijo...

bonita poesía de amor...
Abrazo

Lucía dijo...

Has llenado el poema de la luz del sol al renacer en la mañana.

¡Bellísimo!

Un abrazo grande, Carver.

Anónimo dijo...

Tenía pendiente de leerte con tranquilidad y por fín a estas horas de la madrugada lo he conseguido.

Me encantan los atardeceres de mar, amigo, y tus sentimientos expresados denotan tu exquisita sensibilidad.

Me han encantado tus reflexiones. un abrazo