No llevo alas
sino hombros de piel
adentro
no llevo tiempos
sino caminos de cielo
en el silencio me miro
en el estanque me siento
las gotas de lluvia se
acercan a mirarme
las lagrimas del silencio
se derraman por adentro
te miro en mi espejismo
te delineo en mis sueños
y me reclino en tus hombros
sin tocarte
siquiera los cabellos
tus pensamientos alineo en
mi escucha
no entiendo tu concepto de
amar en silencio
te has apartado del lago de
nuestro encuentro
nuestra meditación todavía
retengo
si vienes
estaremos de nuevo junto a
su vuelo
aquella sencilla hojuela de
pétalo
se enmarca en todos mis
recuerdos
los abrazos nunca dados
entonces
se recrean en otro tiempo
templo de mi locura
recinto de mis versos
eres la poesía
que de siempre
nacía en mis adentros sin
recuerdos.
Por siempre serás
mi verso.
3 comentarios:
Hermoso ese vuelo, ese estanque, esa lluvia y ese llanto por dentro...Dices que ella te inspiraba... yo digo que lo sigue haciendo en éste tiempo.
Preciosos tus versos
Besito volado
Un verso entre tus versos....
un precioso poema.
una lluvia de besos
Que cosa más bonita ese "ser siempre el verso".
Me encanta...,claro que...eso no es nuevo ¿verdad?
Mil besos, querido poeta :-)
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