(oleo -Leonid Afremov)
Se
muere el horizonte cuando te contempla
eres
tú,
en
tu mirada
cuando
los colores de tu iris se tornan acuosos
eres
tú,
en
tu eternidad..., eres tú.
Se
muere el tiempo cuando te contempla
eres
tú,
en
tu mirada
cuando
con los mechones de tus versos me acaricias
eres
tú,
en
tu eternidad..., eres tú.
Muero
un poco mas cada día que paso
lejos
de tus pupilas abstraídas
lejos
de tu cuerpo recostado a mi lado
lejos
del calor que hemos recreado.
Somos
recreación de nuestra propia alma
espejo
de la nostalgia que nos embarga
niñez
de visiones y sonrisas sin pasado, ni futuro
tan
solo somos eso, nuestros niños del alma.
Llámame
tan
solo te espero
para
que me cubras
con
el hechizo de tu magia.
2 comentarios:
Qué belleza...
Parece una oración para convocar a tu amada.
Precioso poema.
una lluvia de besos
Publicar un comentario